Recuerdo cuando plagiaron a mi bisabuelo, fue una tarde cuando desapareció, los buscamos por horas y horas y logramos encontrarlo, al día siguiente apareció un niño con una nota que enviaban los captores. Eran el Sacerdote Vega y Victoriano Ramírez mejor conocido como el 14. bueno regresemos a ese día que llego la nota el la cual pedían $50 000.oo pesos oro, y solo le daban 3 días para recaudad dicha cantidad y el plazo para rescatarlo era hasta las 12 de la noche. Entonces mi abuelo y yo nos dedicamos a ir de una casa en casa y de rancho en rancho con todos nuestros familiares todos nuestros parientes. Pues tenían dinero y podían ayudarnos, pero todos nos decían que si no prestaban el dinero en oro pero quería que cuando se les pagara fuera en oro, pues la moneda era muy variable, y lo que valía en esos años era el ora y la plata.
Cuando por fin reunimos el oro nos dirigimos hacia el cerro del poblado de San Julian, se encontraban, mi abuelo no sabia nadar y hasta le daba miedo meterse a arroyos, ríos o presas, y por consiguiente no sabia nadar. La forma de cruzar los ríos y arrollos era arreando una baca hacia el arroyo o río y se colgaba de la cola, nada nos detenía para rescatar a mi bisabuelo. llevábamos 5 personas mi abuelo y yo para cargar el oro pues nosotros solos no podíamos. Varios kilómetros antes de llegar al citado lugar, hiban a dar las 12 de la noche y mi abuelo tuvo que tomar una decisión confiar en los hombres y correr por medio de los potreros el solo, sin ningún peso o arriesgarce a que cuando llegara ya estuviera muerto su padre. Entonces nos dejo y comenzo a correr, él ara muy alto media más de 2 metros de estatura, entonces su pasa era grande y corría al mismo tiempo que chiflaba, para que supierán que iba en camino, mi abuelo llego 10 minutos tarde, y su padre ya tenia la soga en el cuello les dijo que lo esperarán un poco más de tiempo que algunas personas venían detrás de el con el dinero, nosotros llegamos una hora tarde que es lo mismo que la una de la mañana, mi abuelo les entrego el dinero, lo vaciaron sobre unos sombreros de los que usaban los cristeros, la mayoría de ellos amenazaron a tomar centenarios y le decían al padre Vega "mi general a mi se me hace que nos engaño y no es oro pues esta muy amarillo y un tono dorado muy fuerte" mi abuelo le pidió el Padre Vega que por favor no tomarán el dinero pues al final flotarían monedas y Victoriano Ramírez que era el jefe junto con el sacerdote le dijo que mi abuelo tenia razón y así contaron el oro durante más de una hora, pues yo note, que la mayoría de ellos ni siquiera sabían leer, escribir y mucho menos hacer cuentas.
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